 |
Viejo "algarrobo blanco" (Prosopis alba) que tiene más de 800 años
habita en las afueras de Merlo - San Luis |
James A. Bailey definió conservación de la naturaleza como un proceso social que abarca tanto las actividades profanas como las profesionales, que buscan alcanzar un uso adecuado de los recursos de la vida silvestre y mantener la productividad de sus hábitats.
Por ende, el hombre común también puede hacer mucho para la conservación, por ejemplo a través de la plantación de especies leñosas. El plantar árboles en sus casas, en lugares públicos, plazas, a la vera de los caminos, o en las veredas del barrio, permite aumentar la captura de carbono.
Los árboles sembrados en las ciudades no sólo absorben CO2, ya que un árbol puede absorber 16 kg de carbono por año, sino que proveen de sombra a los edificios durante el verano y los protegen del viento y el frío durante el invierno, reduciendo la demanda de aire acondicionado y calefacción, lo cual evita producir electricidad quemando combustible fósil.
Un cambio de conducta en todo el mundo contaría con millones de voluntades actuando día a día por el cambio. Con el objeto de comprender lo efectivo que sería veamos el siguiente cálculo:
Supongamos que una persona tiene un terreno de 1 hectárea y desea colaborar con el desarrollo sustentable y con la mitigación de los GEIs, para lo cual planta árboles.
Considerando que la línea de base o cantidad de carbono que existe en la hectárea sin realizar la plantación de árboles (Nivel de Carbono) es de 5 tC/ha/año.
Dependiendo de la especie que se plante se pueden obtener distintos escenarios de captura de carbono (Fijación de carbono promedio):
Eucalipto = 11,87 t C;
Pino = 6,87 t C;
Alamo = 11,24 t C.
El balance obtenido de captura de CO2 por cada hectárea sería la fijación de carbono menos la línea de base:
Eucalipto 11,87 t C - 5 t C= 6,87 t C;
Pino 6,87 t C - 5 t C= 1,87 t C;
Alamo 11,24 t C - 5 t C= 6,24 t C.
Como pueden ver la propuesta de plantar árboles está inspirada en la definición de Bailey, porque la conservación es un proceso social, donde han de participar necesariamente los científicos, pero también los ciudadanos. La suma de los individuos en un objetivo común como puede ser aumentar la biomasa arbórea de la Tierra es una segura reconversión de los efectos de los GEIs.
Estimado lector si desea aplicar lo expuesto en el presente artículo lo invito a leer mi libro "Los Recursos Forestales y el Cambio Climático". Si no lo consigue en las librerías por favor no dude en remitirme un comentario solicitando la obra así se lo puede entregar de manera gratuita.
 |
Este libro permite planificar plantaciones con especies
nativas y exóticas en toda la Argentina. |
Cuanto mayor sea la biomasa forestal menor es el CO2 de la atmósfera, porque cada árbol actúa como una esponja absorbiendo dicho gas y transformándolo por medio de la fotosíntesis en madera.
Esta medida también tiene efectos secundarios tales como: preservar las interrelaciones armoniosas existentes entre el paisaje y el uso que se hace de él, usar la sombra de los árboles, proteger los cursos de agua, evitar la erosión y otras.
 |
Miralejos una población que preserva el bosque y conserva el carbono
capturado por sus árboles en San Martín de los Andes (Neuquén) |