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domingo, 31 de julio de 2011

Volver al Futuro


Visita al Massachusetts Institute Technology 
Cuando era un niño una de mis fantasías era poder desarrollar un robot que me ayudara en mis tareas cotidianas. Mi curiosidad por la naturaleza y por el desarrollo tecnológico me llevaron de chico a iniciar viajes de imaginación ayudado por muchas historietas de ciencia ficción y por la observación de la naturaleza. La esencia de niño nunca la perdí y siempre de grande me remonto a viajar en el tiempo con la única máquina que me permite hacerlo: la mente, producto de la evolución natural descripta por Charles Darwin.

Gracias a mis viajes tuve la posibilidad de estudiar biotecnología, estar en laboratorios de excelencia y conocer el Massachusetts Institute Technology (MIT). El conocimiento adquirido me permitió elocubrar sobre aquellas ideas geniales que se me ocurrieron en aquellos años de niño inquieto y curioso por lo que me rodeaba y por la imaginación recurrente de seres artificiales analógicos con los reales. Al ver moverse a los animales pensaba siempre si no eran seres creados por una mente superior ya desaparecida. Algo en mi interior se movilizaba al ver la vida interactuar con su hábitat sin otro sentido que su supervivencia temporal.
Logicamente de grande fuí adquiriendo conocimiento sobre la psiquis humana y me di cuenta que este tipo de fantasías e imaginaciones son propias de nuestra escencia y que de alguna manera u otra todos las compartimos.

Luego de esbozar este prolegómeno los invito a viajar conmigo al futuro que en realidad no es ni más ni menos que transmutar un presente de ciencia y tecnología actual al futuro. Si comparamos los animales con los vegetales podemos observar que los primeros se mueven y tienden a desarrollar características mentales que asociamos con la inteligencia, mientras que los vegetales están fijos y carecen de inteligencia. Las plantas han adquirido la capacidad de autosatisfacerse en lo que respecta a los alimentos a través de la fotosíntesis y son trascendentales para la cadena trófica. Los animales y nosotros no podríamos vivir sin ellos. 

El hombre siempre tuvo en su mente de niño la necesidad de desarrollar nuevos seres que acopañaran nuestras acciones y nos reemplazaran en actividades necesarias para nuestra subsistencia. Yo los llamaría esclavos tecnológicos que hicieran los trabajos para los cuales nosotros no tenemos capacidades innatas. Nadie de nosotros puede explorar hábitas extremos sin la ayuda de tecnología. 

En esto que comenzo siendo una fantasia de niños se desarrollaron dos disciplinas científicas que han tomado dimensiones incalculables por el vulgo. Una es la cibernética cuyos experimentos independientes se volcaron a analizar la movilidad animal para robotizarla de manera analógica. Empezaron por investigar los sistemas nerviosos de los seres vivos para intentar duplicar las capacidades sensoriales y motoras de los animales. 

Por otro lado, surgió otra rama científica que ha evolucionado rapidamente y que desarrolla la inteligencia artificial poniendo su esfuerzo en el estudio del pensamiento humano, y se dedicó a experimentar con grandes ordenadores de alta velocidad estacionaria para mecanizar el razonamiento puro. 

Mientras la cibernética busca desarrollar los procesos sensoriales y motores desarrollados por la evolución biológica en miles de millones de años, la inteligencia artificial busca simular la inteligencia humana que responde sólo a 200.000 años de evolución biológica. Tanto la cibernética como la inteligencia artificial son análogas en tiempo de desarrollo con la evolución biológica.

A partir del big bang se produjeron cuatro procesos evolutivos consecutivos gracias al cumplimiento de las leyes de la física: la evolución química que originó la aparición de todos los elementos de la tabla periódica, la evolución biológica explicada por la Teoría de las Especies de Darwin, la evolución cultural que nace con la aparición del hombre y actualmente la evolución de entes móviles, sensibles y racionales (robots) creados por el hombre y que invadirán la Tierra y otros astros en los proximos años de acuerdo a mi imaginación.

Para aquellos que creen en Dios las leyes físicas y naturales son obra y gracia del Creador. Para aquellos que no creen en un Creador son obra y gracia de lo aleatorio expresado en lenguaje abstracto (matemática). 
Leyenda frente al laboratorio de nanotecnología del MIT
De lo único que estoy seguro es que el fin último de la evolución proyectando el futuro son los robots y el creador es un ser vivo resultado de la evolución biógica y cultural.  Todos los intentos para conseguir que las máquinas sean inteligentes han pasado por la fase de imitación de la inteligencia natural. Lo que pretende la inteligencia artificial es copiar los procesos mentales conscientes de los seres humanos. Esto tiene una limitación y es que los aspectos más poderosos del pensamiento son inconscientes, inaccesibles a la introspección mental y en consecuencia, difícil de registrarlos formalmente. Los cibernéticos en cambio buscaron construir modelos del sistema nervioso de los animales de distintos niveles neurológicos. Esto es una barrera que recién ahora con la nanotecnología se está avanzando porque los sistemas nerviosos tienen números astronómicos de células nerviosas y es muy complejo analizar cómo estas interactúan y funcionan a modo de redes.
 
Insecto robótico que obedece a los ruidos para frenar su marcha
Resumiendo, el desarrollo de la robótica es una copia analógica de la evolución biológica. Los robots están a un paso de ser parte de nosotros. Ya es una estirpe de vida y han pasado de ser juguetes de nuestra imaginación a nuevas especies analógicas que ocuparán nuestros ecosistemas. Muy pronto veremos insectos artificiales actuando como controles de plagas. Me imagino pequeños insectos cargando sus sitemas nerviosos analógicos con energía solar persiguiendo a insectos biológicos u otro tipo de invertebrados patógenos de nuestros cultivos a través de sensores de ferormonas u observando sus formas o utilizando otro tipo de información. Otros seres vivos artificiales monitoreando por nosotros la biodiversidad para controlar nuestros ecosistemas. Robots eternos dependientes de la luz solar para su desarrollo. Estas nuevas relaciones de vida (artificial y natural) desarrollaran seguramente cambios ecológicos y habrá mecnismos adaptativos por parte de los seres biológicos. Me imagino nuevas disciplinas como la ecología de los analógicos, los estudios evolutivos de los analógicos, ya que estos tendrán capacidad de aprendizaje y adaptación. Quizás la especie humana desaparecerá y seguramente quedarán especies biológicas y especies analógicas. Existirá la posibilidad que se desarrolle una nueva especie pensante que tenga nuestras capacidades e imaginación y seguramente creerá en un Creador de los seres vivos analógicos y biológicos en ese tiempo y espacio. Lamentablemente tendrá que imaginar a sus creadores y vivir la fe o la incredulidad. De lo que si estará seguro es de las leyes físicas y naturales.
De izquierda a derecha prototipos de robots: insecto con sensor de ruidos,
oruga de motilidad vibratoria que cambia de rumbo por contacto,
insecto que frena al entrar en contacto con obstáculos

1 comentario:

  1. Muy clara la explicación, interesante. No conocía a éstos insectos robotizados. Los Supersónicos siguen siendo dibujos animados de primera generaciön. Un cariño

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